Por Ivo Ivanovski, director general de la unidad de negocio de iluminación de Arri
La misión principal de ARRI es ayudar a los creativos de todo el mundo a realizar sus ideas con sistemas de cámaras profesionales, equipos de iluminación y soluciones holísticas.
Para desarrollar nuestros productos, sus características y software, escuchamos a nuestros clientes, seguimos las tendencias, creamos nuestras propias innovaciones y captamos conceptos en el mercado y en los flujos de trabajo, de modo que podamos utilizar nuestra experiencia para desarrollar, definir y mejorar nuestros productos. Al hacerlo, respetamos la propiedad intelectual y valoramos el trabajo de los ingenieros de todo el mundo.
Desafortunadamente, se puede observar repetidamente que las patentes se otorgan erróneamente para soluciones técnicas que no son nuevas, sino más bien de vanguardia. Estas propiedades son a menudo explotadas indebidamente por los titulares de derechos, en un intento de reclamar el derecho a ser el único propietario de «invenciones» que de hecho son soluciones técnicas ya conocidas, o para hacer demandas financieras para su uso.
Los fabricantes de diversos productos de iluminación que están bien establecidos en el mercado desde hace muchos años y que hacen uso de funcionalidades de efectos de iluminación convencionales están siendo amenazados actualmente con una supuesta infracción de las patentes estadounidenses que engloban estas conocidas funcionalidades, aunque estas funcionalidades han sido bien conocido en la técnica y establecido en el mercado durante décadas.
En nuestra opinión, estas patentes no deberían haberse expedido y son inválidas, porque los «avances» técnicos que afirman no son de hecho nuevos, sino que ya eran bien conocidos y de uso generalizado en el momento de la supuesta invención. Para que podamos seguir ofreciendo eficazmente a nuestros clientes estas funcionalidades convencionales, nos encontramos en la posición de tener que iniciar DPI (Revisiones Inter Partes) de las patentes estadounidenses existentes, para que la Oficina de Patentes de los Estados Unidos revise su validez legal.
Tenemos que defendernos, incluso para proteger a nuestros clientes y a la industria contra los derechos de propiedad intelectual e industrial que no protegen una innovación, sino que limitan indebidamente las opciones técnicas disponibles.
Como empresa de tecnología cinematográfica activa a nivel mundial con una tradición de más de 100 años, ARRI siempre ha otorgado un gran valor a la interacción con los creativos y nos sentimos obligados con la industria a brindar innovaciones en una competencia leal.
